En un comunicado, donde explica que todavía no ha recibido los datos concretos del ajuste en España, el sindicato denuncia que “supone un retroceso importante para todos los centros y para la propia compañía en nuestro país”.

También advierte de que “supone, además, un paso atrás para un sector que se caracteriza por su alto valor añadido, el enorme efecto retorno para la sociedad de las inversiones que se realizan y por ser un referente en términos tecnológicos y de empleo en las zonas donde se encuentran ubicados los centros de trabajo de Airbus”.

Por último, rechaza esta medida en “la actual situación del mercado aeronáutico mundial (crecimiento de la aviación de pasajeros en un 4% anual hasta el año 2030 y activación de un nuevo ciclo inversor en los presupuestos de defensa por parte de los gobiernos de los países de nuestro entorno) y de la propia compañía, que se encuentra en fase expansiva, con números récords en ventas, en cartera de pedidos, en beneficios, en cadena de producción y en entrega de aviones anuales a clientes”.

Frente a estos planes, UGT reclama cargas de trabajo de otras líneas de negocio que compensen la bajada de cadencia del programa del avión militar A400M para que los centros de trabajo sean viables.