"Como cada año, en este día queremos recordar que todavía queda mucho camino por recorrer para conseguir acabar con la discriminación y con todos los tipos de violencias que sufren las mujeres y las niñas en todo el mundo y en los diferentes ámbitos”, declaró la directora adjunta de Amnistía Internacional España, Ana Rebollar, quien hizo hincapié en que por eso, “Amnistía Internacional sale a la calle este 8 de marzo, en un contexto de movilizaciones, paros e indignación pública por esa discriminación y violencia contra las mujeres”.

En este sentido, denunció que cada año miles de mujeres son asesinadas por el hecho de serlo, ya que, según informes de la Organización Mundial de la Salud, el 70% de las mujeres asesinadas en el mundo lo son a manos de sus parejas o exparejas. En concreto, detalló que en España persisten las barreras para obtener protección, justicia y reparación para las mujeres y niñas víctimas de violencia de género y al menos 916 mujeres han sido asesinadas desde 2003.

Sin embargo, a pesar de que hay que seguir trabajando, Amnistía Internacional resaltó también algunos logros, y recuerda la lucha que muchas mujeres están llevando a cabo, en ocasiones arriesgando la vida o la libertad

“Queremos celebrar, por ejemplo, que por fin es ilegal que los violadores eviten juicios si se casan con sus víctimas en Líbano, Jordania y Túnez” y que “casi 20 años después del conflicto armado en Kosovo, las miles de mujeres y niñas que fueron violadas de manera sistemática van a ser reconocidas e indemnizadas por el calvario que tuvieron que soportar”, destacó Rebollar, quien argumentó que “nada de esto hubiera sido posible sin las millones de mujeres que están saliendo a la calle, movilizando a todos los sectores de la sociedad por la defensa de sus derechos, o sin movimientos como ‘#NiUnaMenos’ o ‘#MeToo’”.