Según informó hoy el Gobierno asturiano, el protocolo “aborda los riesgos de este tipo de prácticas con el propósito de prevenir conductas adictivas y contribuir a que las entidades y colectivos implicados puedan ofrecer una respuesta coordinada y eficaz”.

Para el Ejecutivo de Javier Fernández, esta iniciativa “busca mejorar la eficacia del conjunto de profesionales que se dedica a esta actividad, así como de las instituciones públicas y de las fuerzas y cuerpos de seguridad”. Así como, “garantizar la protección y atención de los jóvenes en las diferentes situaciones que pueden producirse”.

“RESPONSABILIDAD COLECTIVA”

Por su parte, el consejero de Presidencia y Participación Ciudadana, Guillermo Martínez, destacó que se trata de una problemática que “va más allá del cumplimiento de la normativa, exige un verdadero ejercicio de responsabilidad colectiva”.

En su opinión, el valor del protocolo reside en “la manera en que se aborda la protección de los menores mediante una respuesta integral y coordinada, fruto del consenso y la reflexión de todas las entidades representadas en el Consejo del Juego del Principado: empresas operadoras, administraciones, sindicatos, asociaciones de consumidores y usuarios, el Consejo de la Juventud y el colectivo de jugadores con ludopatía en rehabilitación”.

Esta iniciativa, que forma parte del plan de prevención de la ludopatía, se presentará próximamente y se circunscribe únicamente a las prácticas realizadas de manera presencial.