Así lo señaló en un comunicado al valorar el dato del IPC de enero publicado hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE). El sindicato recordó que la Comisión Europea ha alertado “de la pérdida de ingresos de las familias en España, a pesar del incremento del empleo”.

En este sentido, explica que esto “es lógico, ya que las sucesivas reformas laborales, cuyo único objetivo ha sido reducir derechos laborales y salarios, han dado lugar a una precarización del empleo insostenible”.

También destaca que la Comisión "señala grandes disparidades entre los Estados miembros, ya que mientras mejora la situación financiera de los hogares, impulsada principalmente por el incremento de rentas del trabajo, en varios países, entre ellos España, la renta bruta disponible de los hogares sigue estando por debajo del nivel de 2008”.

En este sentido, UGT denuncia que esto se debe “a la intensa devaluación salarial sufrida durante la crisis y a la resistencia del Gobierno y los empresarios a reconocer las consecuencias tan negativas que el incremento de la desigualdad y la injusta distribución de la riqueza ocasionan a nuestro país, tanto socialmente, como económicamente”.

Por ello, el sindicato indicó que “va a luchar por establecer en la negociación colectiva salarios mínimos de 1.000 euros al mes en cada convenio, impulsando el crecimiento de los salarios más bajos, y estableciendo subidas de sueldos que permitan al conjunto de los trabajadores ir recuperando poder adquisitivo”. Además, el sindicato apuesta por introducir cláusulas de garantía salarial, “que preserven el poder adquisitivo negociado de las posibles variaciones de los precios”.