A este asunto se refirió, en una entrevista con Servimedia, Jordi Xuclà, diputado del PDeCAT en el Congreso, quien reivindicó la plaza del 1-O de Girona y dijo que con lo que había que acabar es con las calles del resto de España dedicadas a “golpistas” del franquismo.

Xuclà, quien aseguró que vive en Girona cuando está en Cataluña, añadió que una plaza dedicada al 1-O está justificada y que sería “patético” que alguien intentara legalmente acabar con la Plaza del 1-O de Girona con el argumento de que recuerda a un acto declarado ilegal por los tribunales.

A su juicio, “lo que tendría que cambiar en toda España es que hay todavía muchas calles dedicadas a generales golpistas, a políticos fascistas y un Valle de los Caídos que todavía tiene subvenciones públicas”.

JORNADA “MUY TRAUMÁTICA”

“Nos tenemos que dedicar”, afirmó, “a hacer caer del callejero de tantas ciudades de España nombres de golpistas y si alguien quiere recordar en Girona el 1 de octubre, quiere recordar una voluntad de votar de votar que va a terminar en los tribunales, pero que no se puede cancelar la realidad ni dos millones de ciudadanos (en referencia a los votantes independentistas)”.

Añadió, que su posición es de “respetar” y “apoyar” que el Consistorio de Girona dedique una plaza a la consulta independentista del año pasado, puesto que en esta ciudad se vivieron “de forma muy traumática las cargas policiales”, en referencia a la intervención de las Fuerzas de Seguridad del Estado para tratar de impedir la votación.

“Fue un día muy desgraciado desde el punto de vista de la convivencia de las Fuerzas de Seguridad con los ciudadanos”, concluyó Xuclà respecto a lo que ocurrió en su ciudad el 1-O.