Así se desprende del balance de producción correspondiente al ejercicio 2017, remitido este viernes por la eléctrica presidida por Ignacio Sánchez Galán a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

Por tecnologías, la compañía siguió incrementando su generación eólica (un 5,3% más en sus parques eólicos terrestres y un 12,7% más en los marinos), en un año marcado especialmente por la sequía, lo que se tradujo en un descenso de la generación hidroeléctrica del 32,2%.

El comportamiento en España se vió especialmente afectado por esta situación, con una caída de la producción en el país del 17,3%, hasta los 51.897 GWh, con descensos del 56,9% y el 42,6% en generación hidroeléctrica y minihidroeléctrica, respectivamente.

Sin embargo, logró reducir el impacto negativo del negocio de generación en España gracias a su fuerte internacionalización. La compañía aumentó su producción en Brasil (+35,5%), México (+11,4%) y Estados Unidos (+1,2%).

En concreto, el aumento de la producción en Brasil fue especialmente notable en el área de renovables, con incrementos del 88,7% en generación hidroeléctrica y del 55% en eólica.

Por su parte, en México, destaca la mayor producción con ciclos combinados de gas (+12,4%) y cogeneración (+8,8%), gracias a las nuevas plantas construidas por la compañía que ya comienzan a aportar al total del grupo.

Por otro lado, el grupo Iberdrola aumentó su potencia instalada en todo el mundo hasta los 48.447 megavatios (MW) en 2017, un 2,9% más. Destaca especialmente el incremento de capacidad renovable (+4,6%), con 1.299 nuevos megavatios de potencia eólica terrestre y 350 megavatios marinos, correspondientes al parque Wikinger, en aguas alemanas del mar Báltico y conectado a la red desde el pasado mes de diciembre.

En términos de demanda de electricidad, se mantuvo durante 2017, con un ligero crecimiento del 0,1% hasta los 230.122 GWh, mientras que en España se incrementó un 1,1%, hasta los 93.284 GWh.