Esta tecnología 5G-V2X es considerada como una de las aplicaciones ‘verticales’ más relevantes (esto es, específica para un sector de la economía, en este caso automoción, transporte e infraestructura vial). Algunos de los servicios más avanzados que ofrece la conectividad 5G-V2X incluyen la compartición de información de sensores en los vehículos en tiempo real, la conducción conjunta de flotas de camiones, la conducción asistida y la conducción remota, entre otros.

Debido a los requisitos que imponen la alta fiabilidad y el rápido tiempo de reacción que caracterizan la conducción autónoma, estas redes 5G incorporan un modo de operación llamado ‘Comunicación Ultra-Fiable y de Baja Latencia’. Utilizando esta técnica, en las pruebas se consiguió un 99,999% de fiabilidad, con una latencia de 1 milisegundo. Para Telefónica, esta prueba de concepto “sienta las bases de las pruebas de campo a gran escala que habrá que llevar a cabo en los próximos despliegues comerciales de las redes móviles 5G a nivel mundial”.

El jefe de Tecnología del Grupo Telefónica, Enrique Blanco, señaló que esta prueba supone “otro paso más hacia la comercialización del 5G y una sociedad totalmente conectada”. Por su parte el jefe del Departamento de Tecnología Inalámbrica de Huawei, Wen Tong, aseguró que dicho experimento “constituye una sólida base para materializar nuestra visión del 5G: que posibilite una conducción autónoma cooperativa”.