Además, alertó de que llevará a la región a una “severa crisis económica prolongada en el tiempo, con pocos visos de remitir hasta que la estabilidad política y el respeto a la legalidad constitucional retornen de forma clara”.

En un comunicado, el presidente de la organización, Josep Bou, indicó que “a lo largo de los últimos meses se han encendido todas las alarmas económicas en Cataluña”, con "la fuga de empresas, caída en la creación de empleo, freno a la inversión exterior, caída en reservas hotelera o paralización del mercado inmobiliario”.

Según Bou, si el Parlament no inviste un presidente “viable” y no hay un gobierno que trabaje con “lealtad” a las instituciones del Estado, lo que hasta ahora se podía considerar un “freno económico coyuntural se convertirá en una crisis económica estructural”.

“Cataluña no está para recaídas como resultado de la irresponsabilidad de políticas esquivas de la justicia y sus secuaces”, apuntó el responsable de la organización, quien agregó que “Cataluña, los catalanes y las empresas catalanas merecen estabilidad y un contexto que facilite el crecimiento”.