Las partes acordaron reunirse todos los lunes y jueves en el periodo de un mes que recoge la legislación para acordar el ERE, periodo que finaliza el 11 de febrero. Sin embargo, decidieron no celebrar el encuentro del pasado lunes y reunirse este jueves, dada la numerosa documentación que los sindicatos tenían que analizar.

La entidad ha planteado desde el inicio que el ajuste de plantilla necesario es de 2.510 empleados, aunque rebajó de 57 a 56 años la edad para acceder a la prejubilación.

Bankia ha ofrecido a los sindicatos que, por una parte, los empleados puedan acceder desde los 56 años a la prejubilación, un año menos que en el planteamiento inicial, contando como referencia la edad a 31 de diciembre de 2017. Además, tendrán que tener un mínimo de 15 años de antigüedad.

Los trabajadores que se prejubilen recibirán un porcentaje del salario bruto total, que el banco aún no ha concretado, como indemnización hasta los 61 años y se prevé que se siga aplicando el convenio especial suscrito por la entidad con la Seguridad Social hasta los 63 años.

Por otra parte, los menores de 56 años recibirían una indemnización de 25 días por año trabajado con un tope de 18 mensualidades, además de un plus de antigüedad de 1.000 euros por cada tres años de prestación de servicios.

A estas medidas se suman indemnizaciones por movilidad geográfica a partir de los 80 kilómetros y se prevé la homologación salarial de los trabajadores procedentes de BMN con los de Bankia en 2023.

CRÍTICAS SINDICALES

Desde UGT han denunciado que el planteamiento de Bankia es “desproporcionado e inaceptable”, y lamentan que en la última reunión, la del pasado jueves, no se produjo “ningún avance significativo”.

El sindicato señaló que aunque la entidad diga que “sobra gente”, por su experiencia puede decir “alto y claro que hay una excesiva carga de trabajo en todos los centros, tanto sucursales como servicios centrales”.

Por su parte, CCOO ha pedido a la dirección de Bankia que “rectifique” en su propuesta de ajuste de plantilla y “no se empeñe en hacernos transitar por el camino del conflicto y la movilización”.

“Bankia pretende ir mucho más allá que la simple eliminación de duplicidades, sin apostar por un proyecto de expansión en territorios y mercados donde no tenemos presencia”, señaló el sindicato.