En la iniciativa, el portavoz adjunto de ERC, Gabriel Rufián, considera "gravísimas" las informaciones que otorgan a ese imam un papel de colaborador como confidente de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, y se pregunta por qué los Mossos d´Esquadra "no tenían constancia de la peligrosidad" de ese individuo, que incluso habia tenido contactos con la Policía Nacional.

Pregunta si se le pagó "por los servicios prestados" y por qué el 17 de agosto, el día de los atentados, el Estado "no estuvo presente" para proteger a los ciudadanos de Cataluña de una persona conocida por los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado. Considera que Zoido tiene que "rendir cuentas" por la "nefasta gestión y las sombras que la rodean".

Po su parte, el portavoz del PDECat, Feliu Guillaumes, denuncia que la gestión de este asunto "genera sensación de inseguridad" y subraya que no hay mejor política "que la verdad y la transparencia". "Todos sabemos al menos de una operación frustrada de los Mossos d´Esquadra contra células yihadistas que fueron avisadas previamente por confidentes", concluye.