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La Mesa de edad del Parlament acepta el voto delegado de Junqueras y los demás electos presos

MADRID
SERVIMEDIA

La Mesa de edad del Parlamento de Cataluña, presidida por Ernest Maragall, aceptó este miércoles el voto delegado de Oriol Junqueras y de los otros dos electos que se encuentran en prisión preventiva, en contra del criterio expresado por Ciudadanos y por el PP.

Una vez leída la relación de electos proclamados por las juntas electorales provinciales, Maragall precisó que Junqueras había pedido delegar su voto en Marta Rovira, y Joaquím Forn y Jordi Sánchez lo hicieron en Jordi Turull. Explicó a continuación que la Mesa admitía esas peticiones por entender que obedecen a una "incapacidad prolongada" de asistir a las sesiones, prevista en el Reglamento del Parlamento y atendiendo, además, al "principio democrático fundamental" del derecho a participación política.

La portavoz de Ciudadanos, Inés Arrimadas, pidió la palabra para recordar que las causas previstas en el Reglamento para delegar el voto son "muy claras" y se limitan a permiso de maternidad o paternidad, enfermedad o incapacidad, por lo que pidió una "reconsideración" de esa decisión para no empezar la legislatura "con mal pie".

La misma posición la expresó Santiago Rodríguez, portavoz del PP, mientras que el primer secretario del PSC, Miquel Iceta, tomó también la palabra para precisar que su partido respalda la decisión de la Mesa por entender que no se puede cuestionar un auto del juez instructor en el que dice a esos presos que pueden pedir el voto delegado.

Escuchadas las tres posiciones, Maragall dejó claro que la Mesa confirma su decisión de aceptar ese voto delegado y se procedió a continuación a llamar a los diputados por su nombre para depositar en la urna la papeleta con el nombre de su candidato a la Presidencia del Parlamento de Cataluña.

LAZOS AMARILLOS

Los independentistas acompañaron con aplausos el voto delegado de cada uno de esos electos en prisión preventiva mientras la persona encargada por ellos de depositar su papeleta se dirigía a la urna, y también el llamamiento a los ausentes, Carles Puigdemont y los demás exconsejeros que se encuentran con él en Bruselas. Mientras, lazos amarillos ocupaban sus escaños vacíos.

En su discurso, Maragall aseguró que en esta sesión tendrían que estar "precisamente los que no están" y que se debería estar debatiendo sobre la mesa de diálogo con el Estado para construir el nuevo país que reclama la mayoría de la sociedad catalana. El voto del 21 de diciembre, aseguró, es la confirmación del voto del 1 de octubre.

Su discurso fue criticado por Arrimadas, que lo consideró un "mitin de Esquerra" para el que Maragall no está facultado como presidente de la Mesa de edad que debe únicamente ordenar el debate de la sesión constitutiva del Parlamento.

(SERVIMEDIA)
17 Ene 2018
CLC/nbc