Así lo adelantó este lunes la directora general del Agua, Liana Ardiles, en su intervención en el Madrid Foro Empresarial, donde puso en valor el trabajo que lleva realizando el Ministerio desde el pasado mes de julio para alcanzar un Pacto Nacional por el Agua con el máximo consenso y participación.

“El agua debe ser un auténtica política de Estado, consensuada, que dé estabilidad a las decisiones en materia de gestión más allá de cada ciclo de planificación y más allá de los cambios de Gobierno”, apostilló.

Ardiles se mostró convencida de que ese Pacto es “la solución consensuada a los problemas hídricos que sufre España” y que su finalidad es conseguir un uso más eficaz, solidario, sostenible integrado de los recursos existentes.

Subrayó que, como paso previo para poder plantear el Pacto, fue necesario acometer en la pasada legislatura un trabajo de planificación que culminó con la aprobación de los planes hidrológicos del segundo ciclo en todas las cuencas hidrográficas de competencia estatal y de sus programas de medidas.

Medio Ambiente plantea cuatro ejes fundamentales en el futuro Pacto Nacional por el Agua: el cumplimiento de los objetivos ambientales para la adecuada conservación de los ríos y ecosistemas acuáticos, la atención de los déficits hídricos, la puesta en marcha de los planes de gestión del riesgo de inundación y medidas en materia de gobernanza del agua que garanticen el cumplimiento de los compromisos políticos y jurídicos asumidos con la UE.