En una nota de prensa, Díez detalló que los presupuestos de 2011 están elaborados para repartir “los restos, sin ninguna finalidad inversora y cargados de resignación, igual que el Gobierno”. A su juicio, existe una correspondencia entre los presupuestos y el Gobierno, con un Ejecutivo que no tiene más objetivo que permanecer un año en la Moncloa y unos presupuestos que han nacido sin más finalidad que ésa.

“Estamos ante un Gobierno en crisis, incapaz de presentarnos unas cuentas para salir de la crisis”, abundó, señalando que las cuentas insisten en los mismos errores que el año anterior porque caen en un reparto antisocial y no nacen con el objetivo de remontar la situación, sino de flotar sin puerto de destino, con el consiguiente perjuicio para el país.

Lo más triste, añadió, es que llegan así, pero saldrán peor del Congreso porque, desde su punto de vista el Gobierno aún ha de pagar buen parte del alquiler de la Moncloa al PNV, por el acuerdo para sacar adelante los presupuestos que ya ha permitido el traspaso de 472 millones de euros al País Vasco para políticas de empleo.

“De momento, sólo conocemos el precio del alquiler, pero siempre podrán pactar el pago de algunos arreglos u otras obras…", ironizó Díez. "Pagar la renta de la Moncloa era el paso previo, y aún nos queda saber el coste del chalaneo”. Por el contrario, la diputada anunció que su formación ya está preparando una enmienda a la totalidad a las cuentas públicas.