100 VECINOS DE LA CARTUJA IMPIDEN LA SALIDA DE LOS AUTOBUSES Y PROVOCAN UN CAOS DE TRAFICO "HISTORICO" EN GRANADA
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Un centenar de vecinos de la Barriada de La Cartuja realizaron una concentración al filo de las 6 de esta madrugada para impedir la salida de las cocheras a los autobuses urbanos de la capital granadina, en protesta por la supresión de dos paradas conflictivas de una e las líneas que transita por el barrio.
Los manifestantes, que actuaron con impunidad, no sólo provocaron un caos de tráfico sin precedentes en esta capital, sino que lograron "doblegar" la decisión del ayuntamiento, que acabó reactivando las dos paradas.
Los vecinos obstaculizaron la salida de los vehículos del transporte público hasta la 8 de la mañana y causaron un parón casi general del tráfico urbano, además del estupor de aquellos que pretendían llegar a su trabajo y observaban cómo no apaecía ni un sólo autobus en la capital.
Los problemas de circulación se prolongaron durante toda la mañana en la ciudad, con esperas y atascos de larga duración, a pesar de que los autobuses urbanos comenzaron a funcionar sobre las ocho de la mañana.
LARGA POLEMICA
La polémica en torno a esa línea de autobuses urbanos es antigua, ya que los conductores que la sirven llevan años protestando porlos contínuos atracos que sufren en las dos últimas paradas del trayecto, en pleno barrio de la Cartuj.
Drogadictos y atracadores están al acecho diariamente para asaltar a los conductores de la línea 8 y hacerse así con la totalidad de lo recaudado.
Según explicó a esta agencia el concejal delegado de Tráfico y Seguridad Ciudadana, Lorenzo Capellán, el pasado día 30 representantes de la Asociación de Vecinos del barrio y del Comité de Empresa que posee la concesión del transporte urbano en Granada capital, llegaron al acuerdo de suprimir las dos últimas paradas tras realizar un estudio que demosró la poca afluencia de personas que subían y bajaban en esos puntos.
El Ayuntamiento accedió a la petición de esos colectivos y suprimió las dos últimas paradas, pero la medida provocó la protesta de otra serie de vecinos que parece que no se sienten representados por las personas que el pasado día 30 participaron en la correspondiente reunión.
El concejal delegado de Tráfico manifestó que "si llego a tener conocimiento esta misma mañana de estos sucesos, habría enviado a la policía local para qe impidiera el asedio. No estamos dispuestos a tolerar ni una sola vez más este tipo de actuaciones", aseguró.
El caos circulatorio en la capital se mantenía a primeras horas de esta tarde, en tanto que los manifestantes lograron su propósito, puesto que el concejal decidió reestablecer las dos últimas paradas.
"Esos puntos se suprimieron por parte del Ayuntamiento ante una petición de los propios vecinos, que ahora parecen dar marcha atrás" concluyó el responsable de Tráfico en el Ayuntamiento ganadino, cuando explicó su concesión.
(SERVIMEDIA)
09 Sep 1991
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