Caldera afirmó en la Ser que en España "no todo es tan de color de rosa como lo quiere pintar el Gobierno". En este sentido, aseveró que los primeros cien días de gestión del PP han supuesto "una época de pérdida de oportunidades".

El diputado socialista criticó el hecho de que, en contra de la teórica disposición del Gobierno a alcanzar el mayor consenso posible en todas las materias, "o cierto es que nadie podría recordar ni una sóla medida que hubiera sido aceptada a propuesta de la oposición".

"En lo formal", comentó Caldera, "es cierto que el Gobierno envuelve todas sus propuestas en apelaciones al consenso, pero, al final, usa la mayoría".

En materia económica y social, el portavoz socialista opinó que "estamos objetivamente peor que hace un año". Al respecto, puso dos ejemplos: "En desarrollo social, la ONU (en su último informe) señala que en España están aumentando las iferencias sociales, mientras que en empleo, éste crece, pero no en la forma en que debería hacerlo de acuerdo con el crecimiento económico que tenemos".

Por otra parte, subrayó que la inflación está aumentando. "Los trabajadores y funcionarios españoles", prosiguió, "están perdiendo en términos medios casi cuatro mil pesetas al mes".

De igual modo, valoró negativamente las consecuencias de las recién aprobadas medidas económicas liberalizadoras y dijo que "esas medidas están mal orientadas. Afecan negativamente a sectores que tienen poca capacidad de organización, como libreros y comercio, y son muy insuficientes para grandes poderes económicos".

Por último, se refirió al problema de las listas de espera en los hospitales públicos, para decir que "al principio el Gobierno presumió de que había acabado con este tema y ahora se ha despachado con un plan de choque, bastante oscuro, y nos hemos encontrado con que muchos ciudadanos están padeciendo incluso con su vida la falta de asistencia sanitria".