Un proyecto español promovido por la Fundación para una Infancia y Adolescencia Saludables (Confias), en colaboración con la compañía biofarmacéutica Ferring, intenta ahora determinar este impacto a través de los dibujos que realizan los niños.

Más de 200 pequeños están participando actualmente en este proyecto, que según informaron hoy sus organizadores, verá la luz el próximo año.

"Los dibujos son una importante fuente de información en la exploración del estado emocional de los niños, en cierta manera son nuestras radiografías", afirma Javier Quintero, coordinador del proyecto, vicepresidente de la Fundación Confias y jefe de Psiquiatría del Hospital Infanta Leonor.

A través de los dibujos, añade, "podemos conocer cómo se siente el niño y cómo percibe la realidad o vive un problema concreto, aspectos que son difíciles de establecer en una consulta, ya que los pequeños en este entorno no suelen transmitir su sufrimiento o sus temores".

Sobre la enuresis, precisa, se había realizado poco en este sentido, "por lo que nos parecía interesante poner en marcha un proyecto donde los niños plasmaran lo que sienten y pudiéramos valorar qué problemas emocionales se esconden tras la enuresis".

Y es que, a pesar de la prevalencia del problema, hay "un número importante de pacientes" que no están diagnosticados, señala Confias.

Según los resultados del libro blanco, el 83 por ciento de los pediatras dice que la mayoría de los padres no suele acudir por esta causa al médico, lo que repercute en esa falta de diagnóstico y de tratamiento.

Entre las causas de esta dejación destacan la escasa información que existe sobre la enuresis, así como la vergüenza de los padres de decir que su hijo moja la cama o la poca importancia que le conceden a este problema.